Inmigración Francesa en República Dominicana
El asentamiento de franceses en suelo dominicano puede ser catalogado como el segundo flujo poblacional en importancia de procedencia europea, tras la española. Esta migración alcanzó su clímax desde inicios del siglo hasta la primera mitad del siglo, previo la independencia dominicana de Haití en 1844.
Tras la independencia, la República Dominicana se caracterizó por ser una nación de inmigración moderada, primordialmente de nacionalidades americanas (tradicionalmente de puertorriqueños y cubanos, sumándose los haitianos y los estadounidenses en los siglos Plantilla:Versalitas y Plantilla:Versalitas), siendo la inmigración de nacionales europeos modesta o minúscula, salvo la inmigración española; sin embargo, los franceses históricamente han estado entre las diez nacionalidades que más migran a la República Dominicana.
Contenido
Historia
Presencia francesa durante la colonia española
La historia de los franceses en el territorio de la actual República Dominicana, anteriormente conocida como Santo Domingo, comienza alrededor de 1700 cuando colonos franceses se instalan en la porción occidental del Cibao, tras España haber aceptado la colonización francesa en el oeste de la isla de Santo Domingo que dio lugar al surgimiento del Santo Domingo francés (Saint-Domingue, actual Haití). La colonia española de Santo Domingo vivía una profunda decadencia económica debido al abandono por parte de la metrópolis y la continua emigración de la población a otras colonias más prósperas; el arribo de los franceses al norte de la colonia, con una mentalidad distinta al mercantilismo español, propició el desarrollo de la zona; para la década de 1720, ya estos eran el 25% de la población.[1]
En 1718, una real cédula ordenó la expulsión de los franceses de la colonia. El cabildo de Santiago de los Caballeros envió una carta al rey español solicitando la derogación de la ley, pero esta petición fue ignorada. El alcalde mayor de Santiago, don Antonio Pichardo Vinuesta, rehusó obedecer la orden argumentando que la mayoría de los franceses habían contraído matrimonio con locales, que su expulsión contribuiría a la despoblación de la colonia y que dañaría la economía del Cibao. Pichardo fue arrestado y encarcelado en la ciudad de Santo Domingo. En 1719, el Consejo de Indias razonó a favor de Pichardo y decidió un indulto a los franceses. Entre 1720 y 1721 se produjo en Santiago una revuelta contra de la implementación de un nuevo impuesto a la exportación de res a Saint Domingue; el gobernador de Santo Domingo, capitán general Fernando Constanzo, acusó a la élite cibaeña de querer anexar su provincia a Francia.[2]
En 1770, el gobierno colonial español expulsó a los habitantes de un asentamiento francés en la península de Samaná.
Las Tropas de Leclerc
El 29 de enero de 1802, la mitad de la flota francesa enviada por Napoleón para reimponer el control metropolitano en Saint Domingue y Santo Domingo “donde los negros se han hecho con el poder guiados por Toussaint-Louverture”, llegó a Samaná, la otra mitad apareció en Cap Franςais —Cabo Haitiano— el 3 de febrero.
Esta fuerza expedicionaria de 58,000 hombres estaba bajo el mando del general Víctor Emmanuel Leclerc, quien había llevado consigo a su esposa Paulina Bonaparte, hermana de Napoleón.
La muerte del general Leclerc y las posteriores derrotas del ejército francés, en Haití en 1804, en Santo Domingo en La Sabana de Palo Hincado en 1808 y en la ciudad de Santo Domingo en 1809, cuando las tropas francesas se rindieron a una fuerza naval británica; hicieron fracasar el proyecto de reconquista y se abandonó la idea de la posibilidad de construir un imperio colonial en cuyo centro estaría la isla de Santo Domingo reconquistada, al este La Martinica y Guadalupe, al sur La Guyana; y, al norte Luisiana.
Los técnicos que acompañaron al batallón que quedó estacionado en Samaná, iniciaron los trabajos preliminares correspondientes a las medidas que se tomarían y a los proyectos que se ejecutarían.
Parte del resultado de éstos trabajos fueron una serie de mapas, cartas y planos que se confeccionaron para tal fin; estos mapas de indudable calidad técnica y belleza, que se conservan en la biblioteca del Congreso Norteamericano en Washington, son una muestra evidente de las intenciones de Napoleón para la península y la ciudad de Samaná. El gobierno francés dividió la tierra en cantones y adjudicó dichos terrenos a colonos y militares franceses. Con esta acción las autoridades francesas apoyaron a los colonos franceses que se habían refugiado en Samaná, al igual que lo hicieron en otras ciudades de Cuba y Puerto Rico, como Santiago de Cuba y Mayagüez; colonos estos que salieron de Haití al inicio de la revolución (1791) que culminó con la independencia de ese país (1804). Estos repartos de tierra muestran cierto equilibrio, pues no sólo se beneficiaron a colonos franceses como han afirmado varios historiadores. La muestra de apellidos indica que se tomó en cuenta no sólo el origen o nacionalidad de los beneficiarios, sino también el peso en la conformación de la sociedad samanesa de la época, siendo el mayor porcentaje de población de la península y de la ciudad la de origen francés, ya que la mayoría de las familias españolas que fueron llevadas para la fundación de la ciudad en el 1756, se habían trasladado a Sabana de la Mar, que fue fundada simultáneamente con Samaná; esto por el estado de abandono en que se encontraba Samaná. Cabe señalar que aún hoy el porcentaje de la población de la ciudad es casi en su mayoría de ascendencia francesa, por los colonos y otros franceses que continuaron emigrando allí.
Franceses y dominicanos de ascendencia francesa destacados
- Ángel Miolán (28 de diciembre de 1912 - 16 de abril de 2010 fue un político, fundador del Partido Revolucionario Dominicano y precursor de la industria turística en República Dominicana. Padre del turismo dominicano. Su abuelo León Miolán nacido en Marsella, Francia.
- Francisco Antonio Espaillat Virol, médico y terrateniente; oriundo del Mediodía francés, se estableció en Santiago de los Caballeros en 1758 y llegó a ser la persona más rica del Cibao; tras las invasiones haitianas se refugió en Puerto Rico donde falleció en 1807.
- José María Imbert, militar, político y prócer de la Guerra de la Independencia Dominicana; oriundo de Países del Loira, nació en 1798 y se estableció en Moca llegando a ser su alcalde; tuvo un rol crucial en la Batalla de Santiago durante la Guerra de Independencia.
- Pedro Eugenio Pelletier, militar y prócer de la Guerra de Independencia.
- Furcy Fondeur, militar, político y prócer de la Guerra de la Restauración; oriundo de París, fue ministro de Relaciones Exteriores de la República Dominicana.
- Ulises Francisco Espaillat, político y presidente dominicano; nieto del francés Francisco Antonio Espaillat.
- Pedro Ignacio Espaillat, militar y prócer de la Guerra de la Restauración
- Pedro Francisco Bonó, poeta dominicano. Su abuela era de oriunda de Bretaña.
- Juan Antonio Alix, poeta dominicano, su padre era de origen francés.
- Pedro María Archambault, historiador, novelista, maestro de francés, periodista y diplomático dominicano.
- Alfred Deetjen Merecette, presidente dominicano en 1876.
- Emilio Prud’Homme, abogado dominicano y compositor del himno nacional de la República Dominicana, su padre fue un militar de origen francés prócer de la Guerra de la Restauración.
- Gastón Fernando Deligne, escritor dominicano.
- Rafael Alfredo Deligne, escritor dominicano.
- Alejandro Woss y Gil, militar y político dominicano; su bisabuela Marie Servillet era de origen francés.
- Enrique Deschamps, maestro y diplomático dominicano; su padre era de origen francés
- Carlos Nouel y Pierret, escritor, legislador y diplomático.
- Adolfo Alejandro Nouel, sacerdote, pedagogo y presidente dominicano. Hijo de Carlos Nouel y hermano de Bienvenido Salvador Nouel; tres de sus abuelos eran de origen francés.
- Bienvenido Salvador Nouel, poeta dominicano. Hijo de Carlos Nouel y Pierret y hermano de Adolfo Alejandro Nouel; tres de sus abuelos eran de origen francés.
- Rosa Smester, escritora y maestra. Su padre era de origen francés.
- Rafael Bonnelly, abogado, diplomático y presidente dominicano; tres de sus abuelos eran de origen francés, incluyendo al antedicho coronel Furcy Fondeur.
- Sully Bonnelly, diseñador de modas dominicano.
- César de Windt Lavandier, marino y meteorólogo dominicano, su bisabuelo Jean-Baptiste Alexander Lavandier era un marino francés de la flota de Leclerc.
- Renée Klang de Guzmán, primera dama de la República Dominicana. Su padre era un diplomático francés.
- Antonio Imbert Barrera, militar dominicano; dos de sus bisabuelos eran de origen francés, incluyendo a José María Imbert.
- Joaquín Balaguer, escritor y presidente dominicano; al menos dos de sus bisabuelos eran de origen francés
- Eugenio de Jesús Marcano Fondeur, biólogo dominicano; bisnieto del francés Eugène Fondeur, hermano del susodicho coronel Furcy Fondeur.
- Johnny Pacheco, músico dominicano; bisnieto del francés Cristophe Rochette.
- Carmen Imbert Brugal, jurista, escritora, periodista y columnista dominicana; dos de sus tatarabuelos y un trastatarabuelo suyo eran de origen francés.
- Ito Bisonó, político y empresario dominicano, bichozno de Pedro Bisonó Framingdano, nacido en Francia en 1775.
- Ligia Bonetti Dubreil, empresaria dominicana, descendiente de Jean François du Breil, oriundo de Bretaña.
Enlaces externos
Bibliografía
- Saturria, Haliday (2014). Migración Francesa a La Sierra. Santo Domingo: Letra Gráfica.
- Deive, Carlos Esteban (1984). Los refugiados franceses en Santo Domingo (1789-1801). Santo Domingo: Universidad Nacional Pedro Henríquez Ureña.
- Gutiérrez Escudero, Antonio (1985). Población y Economía en Santo Domingo, 1700-1746. Sevilla, España.
- Hernández González, Manuel (2007). Expansión fundacional y crecimiento en el norte dominicano (1680-1795): El Cibao y la Bahía de Samaná. Santo Domingo: Editora Búho. ISBN 978-9945-020-12-0.
- Hernández González, Manuel (2006). La Colonización de la Frontera Dominicana (1680-1795). Santo Domingo: Editora Búho. ISBN 9945-020-08-0.</ref>
- Rodríguez Demorizi, Emilio (1955). La Era de Francia en Santo Domingo. Santo Domingo: Editora del Caribe.
- Rodríguez Demorizi, Emilio (1955). Viajeros de Francia en Santo Domingo. Santo Domingo: Editora del Caribe.